9 ene 2018

1ª PINTADA BOSQUE DE LOS PEREGRINOS CAMINO DE UCLÉS 2017



Los Días 22, 23 y 24 de septiembre 2017 tuvo lugar el “1º encuentro peregrinos para pintar el bosque de los peregrinos”.



Vaya por delante que todo esto se ha hecho para proteger el bosque que está en el camino de Uclés.



Este verano hemos visto como la plaga de
procesionaria ha matado pinos sanos, estas orugas van en fila y siguen así hasta subir por el tronco de los pinos, una vez arriba se reparten y anidan formando grandes bolas de una especie de seda o capullo que no deja respirar al árbol y termina por matarlo. 



Estas orugas no suben por paredes,  plásticos o cualquier material que no sea tronco de árbol.



En algunos bosques se ha protegido a los árboles con pintura en los troncos para que las orugas no puedan subir, pues al no detectar el tronco retroceden.



Con ese fin de protección la Asociación ha  invertido más de 500 euros en comprar una pintura especial al agua que no daña en absoluto al pino incluso es apta para niños en cunas o parques.



Además del coste en materiales, está el coste de trabajo, de los que han empleado su tiempo y dinero para venir de puntos tan dispares de España como  Alicante, Zaragoza, Logroño, Castellón, Orense, Madrid y diversos pueblos de la comunidad madrileña.



El ayuntamiento nos cedió el polideportivo para que pudiéramos dormir facilitando así la estancia en Barajas de Melo...esa misma tarde se barrio y fregó toda la parte donde pondríamos las colchonetas.



Con todo preparado el viernes 22 comenzaron a llegar los peregrinos a Barajas,  esa misma noche cenamos de lo que todos trajimos de casa en el polideportivo y preparamos las colchonetas que serían nuestras camas durante los días de trabajo.




Además este pueblo tiene un buen supermercado en el que compraríamos los suministros que necesitáramos.




La primera noche fue corta o al menos eso me pareció a mí, en nada ya estábamos todos juntos desayunando y el olor a pan recién tostado animaba a sentarse a la mesa…



después de recoger todo salimos para el bosque.
Este se encuentra a 3 km del pueblo por un camino liso,  lleno de gravilla por lo que no hay peligro de barro.



Como era la primera vez que hacíamos algo así, al principio, hubo un poco de descontrol pues todos 



los peregrinos querían a la vez su bote de pintura impacientes por pintar los árboles que se les habían adjudicado.



Para ello meses atrás fui recolectando recipientes con tapa en los que se les echaba la pintura blanca



 para fondear y de ese modo los colores saldrían más luminosos sobre el blanco



Al final de la mañana del sábado se consiguieron pintar 60 árboles con blanco.



Como el día estaba caluroso, pero muy agradable, la comida se hizo a pie de camino,



para ello contábamos con un peregrino que es chef de cocina en su trabajo, por lo que entre María y Luis prepararon una paella de 50 raciones para todos los peregrinos. 




Con los platos hasta arriba de rica paella de marisco y una ensalada de tomates regalados por los campesinos de las huertas cercanas, nos pusimos a comer todos juntos.  




Algunos repitieron, otros no pudieron ya que su estómago no tenía más hueco, y  después del postre: natillas y café, descansamos un poco.



Y preparamos más tarde los colores, algunos casi ni descansaron pues tenían muchas ganas de ver su obra de arte terminada.



La tarde pasó con los peregrinos en sus puestos de trabajo y con el intercambio de colores para no malgastar pintura.



Hasta que a las 7 de la tarde se tocó la bocina para que los peregrinos recogieran sus cosas para



terminar la jornada ya que teníamos previsto ver atardecer desde la Cruz de Pelegrin.



Recogimos todo y con el tiempo casi justo llegamos a la Cruz de Pelegrin para ver atardecer, 



aunque unas nubes impidieron ver todo el atardecer,  mereció la pena estar allí todos juntos.



Desde allí, casi de noche,  regresamos al polideportivo para cambiarnos de ropa, ducharnos e ir a cenar. 



La cena sería ligera y económica pues la verdad había poca hambre después del paellon.



Cansados del día de trabajo nos fuimos a dormir.
A la mañana siguiente,



Miguel madrugó un poco más para tener las tostadas preparadas, poco después estábamos desayunando y planeando el plan de trabajo para el domingo.




Nos dirigimos al bosque y según nos acercábamos 



ya veíamos el cambio que había al día anterior. 



Allí instalamos el campamento y el reparto de botes



de pintura, brochas, pinceles planos, etc. En media



hora ya estaban todos los peregrinos repintando y repasando los árboles que habían pintado el sábado.



A las 12 un alto en el trabajo y María puso un aperitivo en la mesa,


pero había que terminar todo porque se echaba encima la hora de comer…



Luis el cocinero sería el encargado de hacer la comida en  la propia paellera…



Días antes se programó que la comida del domingo fuera hacer un plato combinado, y vaya si salió bueno y rico…



En unos minutos la paellera de 50 raciones  se llenó de huevos que se freían rápidamente, y enseguida se echaban al lado morcillas de arroz y cebolla, chorizo frito, costillas y filetes de lomo adobado.  Así fueron saliendo los platos por persona… 2 huevos fritos, 2 filetes de lomo, costillas fritas,  1
chorizo y una morcilla ¡¡¡menudo plato teníamos cada uno!!! Aparte María había puesto tortilla de patata y fuet lonchado y de postre flan de huevo.
La verdad que la comida junto al camino fue todo un éxito y lo pasamos francamente bien.



 Después tomamos un café  y más tarde recogimos todo…




De vuelta al polideportivo algunos se ducharon mientras yo recogía todo,  barría y fregaba la zona que utilizamos.




Después lo peor de este finde… las despedidas…
Con todos de vuelta a sus casas y de camino a la 



mía hice una valoración muy positiva de este encuentro para salvar el bosque, si bien solo 




pusimos un granito de arena, ya que el bosque 




tendrá unos 600 árboles y conseguimos proteger solo 72.

Lo más importante es que los peregrinos que estuvieron se marcharon felices, 




pese a tener que trabajar y han sido ellos mismos los que me han propuesto que planifique una nueva



fecha para continuar con el trabajo para salvar el bosque… también se ha propuesto hacer dos 



equipos unos pintando y otros recogiendo todas las ramas secas que cubren el suelo para evitar así un posible incendio.



Al no poder quemarse preguntaremos al ayuntamiento que hacer con dichas ramas para que el bosque quede limpio.



En la primavera se buscará la fecha adecuada para hacer la 2ª pintada del bosque para proteger la vida de los árboles del camino.


Muchas gracias a todos… Luis Manuel el Cocinero, José y Ángeles de Castellón, José Antonio de Zaragoza, Toñi de Alicante,  Montse de Logroño, María de Orense, Lola de Arganda, Ana y Mario de Madrid,  Marilo de Fuenlabrada, Miguel de Móstoles y María y Rossi de Rivas.




Dar las gracias también a los campesinos que nos dieron los tomates para la ensalada, a Vicente por ayudar con los trámites y al Sr. Severiano, dueño del bosque por darnos la oportunidad de salvar los árboles de su bosque.

No hay comentarios:

Publicar un comentario